«Otra ronda»
“Otra ronda” es una película dirigida por Thomas Vinterberg que reúne a Mads Mikkelsen, Thomas Bo Larsen, Magnus Millang y Lars Ranthe, donde se relata un experimento a modo de excusa y evitación del sufrimiento vital por medio del alcohol bajo el pretexto de la búsqueda desesperada de un cambio a mejor.
“¿Qué es la juventud? Un sueño ¿Que es el amor? El contenido de ese sueño” (Søren Kierkegaard). Con esta cita abre el telón esta recomendable película apegada a los problemas psicológicos y desordenes emocionales que contienen sus protagonistas y que el consumo de alcohol agravará impactando sobre cada uno de ellos con diferentes consecuencias.
Reunidos los cuatro en una cena celebración de cumpleaños, uno de ellos expone la teoría del psiquiatra y escritor noruego Finn Skårderud, que dice que los seres humanos nacemos con un déficit de 0,05% de alcohol en sangre por lo que solamente cuando compensamos esa deficiencia podemos alcanzar nuestra mejor versión de nosotros mismos mejorando en los diferentes ámbitos de la vida familiar, social, laboral, etc. En esta cena escucharemos algunas falsas creencias y expectativas comunes asociadas al alcohol como la búsqueda de confianza por medio del alcohol.
Esta visión biomédica reduccionista del déficit y la compensación del ser humano sumado a un momento de crisis existencial de vacío, abandono y pérdida de identidad les conduce a estos cuatro profesores a tomar la decisión de iniciar un experimento sociológico con ellos mismos. Para tal fin harán una ingesta de alcohol de forma diaria poniendo fin a la misma a las 20:00 horas de la tarde. Con ello pretenderán demostrar la hipótesis de que sus vidas pueden mejorar en todos los diferentes aspectos manteniendo la tasa de alcohol en sangre al mismo nivel durante el día.
Esta película, sin caer en moralismos ni buscando ser aleccionadora, nos trae el dramático problema del alcohol más allá de las fronteras de Dinamarca. El desencanto vital, la perdida de uno mismo, la depresión, la angustia en unos hombres de mediana edad que en su depresiva búsqueda de encontrar una salida a sus vidas se convierten en presas fáciles de la enfermedad del alcoholismo. Trágicamente se deslizan veloces hacia su propio vacío como quien jugando resbala al interior de una botella mediante la fantasía de control y la falsa creencia de estabilidad e inocuidad del consumo.
Se advierte en la película del concepto que Skårderud denominó “ignición”, ese momento o frontera donde el consumo de alcohol se puede convertir en pérdida de control y por lo tanto se inicia lo que denominamos el trastorno por dependencia de alcohol. Esa es la última estación para apearse, aunque es solo una ilusión porque, como suele ser frecuente, ya es demasiado tarde.
Dr. Ricardo Bravo de Medina
Psicólogo Especialista en Psicología Clínica
