Muchos pacientes consultan por un problema de alcohol caracterizado por un consumo excesivo realizado en episodios breves, como de fin de semana, con pérdida de control sobre el propio alcohol.
En esta tipología de alcoholismo no existe dependencia física y uno puede estar sin consumir alcohol durante meses sin necesitarlo y con una vida absolutamente normalizada y funcional. Sin embargo, ocurre que un día salen por ejemplo de comida con los amigos y se encuentran con un consumo sin retorno, no pueden dejar de beber. Se bebe hasta que el cuerpo aguante.
La persona puede ser consciente de lo que le pasa e intentar voluntariosamente no beber y puede que en ocasiones lo consiga con la consiguiente fantasía de control sobre el alcohol y la falsa idea de que lo puede controlar. No es así. Tenemos que ser consciente de que estamos ante una adicción
Este tipo de alcoholismo es paciente, se enmascara en una aparente normalidad y espera una situación de consumo para disparase sin control.
Asimismo, y mientras uno está bebiendo en un inicio, puede ser consciente de lo que hace e incluso de no querer hacerlo, sin embargo, ya no puede parar y acaba de mala forma, pudiéndose poner en riesgo a el mismo o a otros como consecuencia de ese consumo. Todo esto hace sufrir tremendamente a la persona que lo padece, que no puede entender que le pasa y porque le ocurre esto, teniendo como consecuencia sentimientos de vergüenza y culpa.
Debemos de entender que este tipo de consumo es una forma de alcoholismo y requiere tratamiento psicológico ya que es una enfermedad progresiva que irá creciendo y contaminando e interfiriendo diferentes ámbitos de su vida
Dr. Psi. RICARDO BRAVO DE MEDINA
Psicólogo Especialista en Psicología Clínica
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