Cuantas veces me dijo que no le entendía, que no pasábamos tiempo juntos, que estaba siempre enfadada, que le hablaba mal y que un día se iba a marchar. Y yo no lo he visto o simplemente no he querido verlo. Sus peticiones me parecían tonterías, sus demandas que no eran para tanto. Yo pensé que estábamos bien hasta que un día me dijo que se iba con dolor y se marchó.
El mecanismo de negación, el no querer ver, el no dar importancia a lo que el otro piensa o siente porque nos parece una tontería se convierte en la ausencia de un Nosotros en la relación de pareja. Y si no se construye un Nosotros no existimos la relación de pareja como tal, tan solo es una agrupación de dos.
Antes del Nosotros existe un Yo. Sin entender que me pasa, sin el autoconocimiento de cómo me afectan las cosas o las vivencias del pasado y del presente, sin poner en orden mi propia historia, mis deseos y mis necesidades es difícil construir un Nosotros. Construir una buena autoestima y confianza, salir de posiciones pasivas y victimistas es de suma importancia. La raíz de todo conflicto emocional se basa en la negación, la supresión o evitación de las propias emociones o pensamientos.
Tampoco se puede construir una relación basándose en las reglas de relación vividas en mi familia de origen ya que debemos asimilar y afrontar que el Nosotros implica una ideología y filosofía nueva construida con el esfuerzo de dos personas que se quieren y quieren estar juntas. Pero quererse no es suficiente para edificar una pareja, nunca es suficiente. La relación y el querer auténtico es un acto de la voluntad que implica mucho trabajo, esfuerzo y generosidad personal por ambas partes.
La pareja para poder definirse como tal se asienta sobre el compromiso y respeto mutuo, el conocimiento profundo del otro en sus miedos y necesidades, la actitud del cuidado hacia el otro, la honestidad entre ambos, la aceptación y responsabilidad por el otro, la afectividad, la sexualidad sana o la empatía por el otro. Estas son algunas de las características de una pareja sana psicológicamente.
Te has preguntado alguna vez, ¿qué significa ser la pareja de alguien? Muchas relaciones de pareja fracasan porque no se han pensado como un Nosotros que hay que construir con una identidad independiente o al margen de las propias individualidades que de base también deben de haberse construido de forma sana primero.
La pareja es como un ser vivo que tiene que crecer, desarrollarse y madurar. Existen parejas bebé que piensan que su felicidad es responsabilidad del otro, parejas adolescentes que solo piensan en ellos mismos buscando su propio beneficio de forma egoísta y parejas maduras que saben comunicarse, ser asertivos, saben confiar y tienen expectativas realistas con respecto a su pareja. Parejas que no se escuchan, que no se comunican, que no se respetan, que no se apoyan y otras que se unen ante la adversidad, que desde la honestidad buscan la forma de resolver los problemas juntos, que son realistas ante el otro y ante la vida, que se brindan apoyo y se saben perdonar.
Nunca es tarde para tener una relación de pareja sana, es decir, para aprender a comunicarse, a compartir el tiempo juntos, para dar valor a los deseos del otro, para conocer profundamente a la persona que convive contigo, para cuidar la relación y otras tantas cuestiones, pero eso si haciendo el trabajo necesario para recoger estos frutos de equilibrio y salud, mas aun si cabe si hay hijos de por medio.
Dr. Psi. RICARDO BRAVO DE MEDINA
Psicólogo Especialista en Psicología Clínica
